Lejos del ecuador

...finalmente cuando la nieve se presentó en mi vida, se hizo acompañar de nuevas y entusiastas sensaciones, por lo cual es hasta ahora que me percato acerca de mi lejanía con respecto de la línea del Ecuador. Si bien mis padres me dijeron siempre: "nadie sabe lo que tiene hasta que lo ve perdido" no habría encontrado de hecho un mejor momento que este para citar el mencionado refrán. Los termómetros se encuentran todavía por debajo de los cero grados centígrados (en el caso de un día "cálido") en el tercer mes de un invierno crudo y castigador; mis manos (así como el resto de mi cuerpo) duelen, al tiempo que añoran la presencia del dios Sol (la verdadera fuerza creadora y dadora de vida)... en fin, sin mayor nostalgia, ni mucho menos melancolía, solo quise quejarme un poco (como el infante que soy)... al final considero que me he portado (hasta este momento) como todo un guerrero (considerando mis circunstancias), y dicho sea de paso que tengan un bello, soleado y envidiado día. Los dejo con una captura playera que realice ya hace tiempo...